La elección de
nuestra obra literaria se basa en una serie de requisitos:
- Resulta atractivo a
ojos de los más pequeños. Las ilustraciones del cuento resultan sugestivas
debido a su color y por los diferentes animales que aparecen en el desarrollo
de la obra.
- Se pueden trabajar
algunos valores destacando la tolerancia y el respeto. Resulta importante que
los niños y niñas asimilen dichos valores desde edades tempranas para
comprender las diferencias que puede haber entre unos y otros.
- Fomenta la
creatividad e imaginación. El niño construye su mundo interior a través de la
lectura de los diferentes cuentos. Esto ayuda al desarrollo de su creatividad e
imaginación.
- Recoge las tres
áreas de la Orden del 5 de agosto de 2008. Engloba las áreas de conocimiento del
entorno y sí mismo, autonomía personal y lenguaje: comunicación y
representación.
- Promueve la
diversidad y sociabilidad. La obra ayuda a comprender la diversidad cultural
del entorno en el que viven.
Según Teresa Colomer,
observamos que posee algunas de las características que esta nombra como
imprescindibles para que se categorice como obra literaria adecuada para las
edades tempranas:
·
- Apertura hacia la
experimentación. Es la capacidad de un texto para aportar cosas fuera de lo
convencional y lo tradicional. En este caso podemos relacionarlo con el hecho
de que el elefante Elmer es de colores y no gris como el resto de elefantes.
- Llenos de humor. La
risa es atractiva para los niños. Esta tiene que ver con el placer estético y
el disfrute unido a lo absurdo. Las bromas del elefante el Elmer se pueden
relacionar con las bromas que hacen los niños y niñas a estas edades.
- Incitadores de la
aventura. La mayoría de los libros infantiles son sobre hechos cotidianos y
concretos. Esta obra se sale de lo cotidiano e incita a la aventura y a que los
niños se sumerjan en el cuento.
- Sin sujeciones
didácticas. El valor literario y artístico debe ser lo primero en lo que nos
fijemos, en lugar de qué pueden aprender. Tanto las ilustraciones como la
narración invitan más a un disfrute estético que didáctico.
- Sin estereotipos.
Tenemos que enseñarle la contradicción de los estereotipos para hacer pensar a
los alumnos. La diferencia de Elmer respecto a los demás elefantes no nos
muestra una diferencia como tal.
- Sin tanta ternura a
flor de piel. Este libro cumple este requisito ya que no resulta un libro
empalagoso pudiendo observar en él una literatura adecuada para la etapa de
infantil.
- Con mayores anclajes
en el contexto. No es solo un instrumento para explicar la vida de Elmer, sino
que también se puede relacionar con las experiencias de los más pequeños
durante su desarrollo.
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